La estrella del básquet nacional, en el interno de Hebraica, hermoso momento.
Fueron minutos mágicos en el gimnasio cubierto para las 300 personas que estábamos ahí. Nos llenaste de NBA y Generación Dorada.
Viniste con humildad a jugar al básquet, nada más, pero hiciste malabares. Todos fascinados por tu presencia y calidez humana.
Gracias Amigo. por compartir un rato con nosotros en Hebraica Argentina – Pagina Oficial
Ganaste la medalla de Oro en Atenas 2004, fuiste jugador de la Selección Argentina en el mejor momento de la historia y llegaste a la NBA. Pero ayer nos regalaste el partido de nuestras vidas a los que amamos este deporte. Fue un rato para cada equipo.
Una de las experiencias más lindas para nuestros jugadores y para nuestra institución.
Nuevamente gracias.