Desarrollé un nuevo hobby: ir al hermoso edificio de Hebraica Sarmiento y leer las actas de las reuniones antiguas de la Comisión Directiva. Es un honor para mí ser miembro de la Comisión Directiva, y seguir los pasos de tantos grandes pensadores. Como aprendí en una charla reciente de Gerardo Mazur sobre la historia de Hebraica, Hebraica fue fundada por escritores. Y como escritor yo mismo (aunque quizás no te darías cuenta, leyendo lo infantil y simple que es mi escritura en español; no soy Joseph Conrad, que creció hablando polaco, aprendió inglés en barcos piratas, y se convirtió en uno de los más grandes escritores de lengua inglesa de la historia), es un honor para mí estar en la Comisión.
Decidí empezar leyendo algunos libros de actas de reuniones realmente viejos. Y hay una historia divertida. Agarré el primer libro del estante, y lo abrí en una página al azar. Página 53: actas de la reunión de la Comisión Directiva del 10 de mayo de 1927. Empecé a leer las notas, en la hermosa caligrafía cursiva de principios del siglo XX. Las actas comienzan con las renuncias (Benjamín Zivik dejó de ser socio a partir de esa fecha) – ¡uh, quizás ahora también deberíamos iniciar cada reunión de la Comisión Directiva revisando quién se fue! Las actas también registran que al 28 de febrero de 1927, Hebraica tenía un saldo de $2116.87 pesos.
Pero después, las actas de la reunión de ese día se vuelven súper interesantes – ¡y no puedo creer que justo abrí esa página al azar! Ese día, decidieron aprobar (y dejarlo registrado en las actas) los Estatutos de Hebraica. Sí, hasta ese momento, no existían. Pero ésta fue la fecha y el momento en el que la Constitución de Hebraica entró en vigor. Es interesante porque, sólo leyéndolo en las actas, podés ver todo lo que fue tachado y cambiado; la frase «creará instituciones deportivas» tiene el «deportivas» tachado y «de ejercicio deportivo» agregado después (en la página 55), por ejemplo. Casi podés escuchar a la Comisión debatiendo las palabras exactas a utilizar, y verlo reflejado en los tachones y agregados y notas al margen. ¡Ay, lo que estamos perdiendo con todo moviéndose al mundo virtual!
Le saqué foto a cada página, y las adjunté acá para que puedan leer todo. ¡Espero que disfruten tanto como yo al leerlas!